l fenómeno conocido como “enganche” genera fuertes alianzas entre víctimas y sus agresores. En otros casos la naturaleza sexual de este tipo de delitos genera sentimientos de vergüenza y culpa comunes en muchas víctimas. Por estas y muchas otras razones, una niña, niño o adolescente puede oponerse a denunciar o a participar en un proceso de justicia.
El acompañamiento psicoemocional del equipo multidisciplinario de la PPNNA busca disminuir los efectos negativos de su participación en un procedimiento jurisdiccional o administrativo, y que este forme parte de un proceso de redignificación que le ayudará a la recuperación emocional. Sin embargo, los propios efectos de la victimización pueden hacer que la niña, niño o adolescente no sea capaz en un primero momento de percibir dicho potencial.
Esta situación coloca a las y los abogados de la PPNNA en un dilema. Por un lado, sostiene una obligación de proteger a la niña, niño o adolescente particular que ha sido afectado. Parte de dicha protección significará sin duda el respeto a los procesos emocionales que necesita vivir y el tiempo necesario para ellos sin ejercer una presión contraria a su sanación. Por otro lado, como servidor público obligado no solo con la niña, niño o adolescente en cuestión sino con la infancia en general, enfrenta la obligación de actuar de manera oficiosa ante el conocimiento de un posible delito.
Si bien esta situación es compleja, no es irresoluble. Las acciones que tome la o el abogado deberán equilibrar en la mejor manera posible tanto las necesidades de la niña, niño o adolescente en particular con las obligaciones de la PPNNA con respecto a la infancia en general y otras posibles víctimas.
Concretamente el equipo multidisciplinario y, en particular, la o el abogado deberán:
- Dar aviso a las autoridades para investigar sin la colaboración de la niña, niño o adolescente.
- Explicar a la niña, niño o adolescente la obligación de la PPNNA liberándola de esa responsabilidad.
- Ayudar a la niña, niño o adolescente a liberarse del enganche con el agresor.
- Promover las medidas de excepción necesarias para la protección de la niña, niño o adolescente en casos extremos.