La o el abogado y la protección de la niña, niño o adolescente.

U

n aspecto prioritario que deben tener presente las y los abogados representantes legales de las niñas, niños y adolescentes víctimas de ciberdelitos sexuales, es la necesidad de asegurar la mayor protección y respeto a la integridad e intereses de la víctima como un aspecto central de cualquier actuación dentro del proceso de justicia y fuera de este.

Las y los abogados que representan a las víctimas deben asegurarse de que éstas puedan acceder a los servicios de apoyo y recuperación tanto médicos, sociales o de asistencia psicológica y jurídica que les permitan lograr su recuperación integral y el restablecimiento de su vida cotidiana, así como ayudarles a llevar el proceso judicial al que haya lugar10.

Es importante tener en cuenta que ningún proceso de justicia debería tener impactos perjudiciales en las víctimas. Por ello, es obligación del Estado asegurar que el acceso a la justicia no se convierta en un factor para la perpetuación del sufrimiento o los impactos psicoemocionales derivados del delito, por lo que las acciones que impulse el Estado, así como aquellas que desarrollen los distintos actores jurídicos que interactúan en un proceso penal, deben tener como centro de la acción la visibilización de las necesidades y deseos de las víctimas de forma tal que ninguna decisión o actuación se traduzca en una nueva forma de violencia. Adicionalmente, la participación de las víctimas en los procesos judiciales debería tener un efecto de resiliencia en donde resulten fortalecidas, dejando en un segundo término el carácter sancionador.

Por otra parte, existe un conjunto de principios (con independencia del proceso penal) que deben orientar la actividad de las y los abogados que representan los derechos de las víctimas. Es decir, deben asumir una posición proactiva en la protección de sus derechos y no meramente reactiva con relación a la actuación del Estado o de otras autoridades. En otras palabras, las y los abogados de NNA deben exigir a las autoridades el cumplimiento de sus obligaciones de protección y restitución de derechos, y que éstas se realicen de manera diligente.

Para lograr cumplir con sus obligaciones de protección de niñas, niños y adolescentes, las y los abogados deben en particular tener presente:

  • La protección en cada participación de la niña, niño o adolescente dentro del proceso de justicia
  • Litigar con los máximos estándares en protección de niñas, niños y adolescentes.
10ONU, Directrices sobre justicia en asuntos concernientes a los niños víctimas y testigos del delito, párr. 12, párr. Párr.22.